Ingredientes:
- 4 patatas peladas. Nosotros al ser dos solo utilizamos dos.
- 2 dientes de ajo.
- 1 cucharadita de orégano.
- Media cucharadita de comino.
- 2 o 3 granos de pimienta negra.
- 1 cucharadita de pimentón.
- Aceite.
- Sal.
- 1 rebanada de pan.
- 1 cucharada de vinagre.
- 1 ramita de perejil.
- 1 vaso de agua.
Preparación:
Pelamos y lavamos las patatas, las cortamos en trocitos o en rodajas gorditas. Freímos en abundante aceite de oliva. reservamos en una olla. Espolvoreamos con orégano y reservamos.
Freímos la rebanada de pan y los dos dientes de ajo y echamos en el mortero. Le añadimos un poco de sal gorda, los granos de pimienta, el poquito de comino, perejil y machacamos haciendo una pasta.
Por otro lado quitamos el aceite de freir la patatas y dejamos como dos cucharadas, calentamos y echamos el pimentón un momento para que no se queme. Echamos el aceite con el pimentón en las patatas.
También le echamos a las patatas el majado del mortero con un vaso de agua y vamos calentando en el fuego y dándole vueltas. Añadimos el vinagre y dejamos unos minutos al fuego.
Están muy buenas de sabor, pero personalmente no me gusta mucho la textura, que al echarle el agua quedan como blandas, pero a quien le guste esa textura adelante.
¡¡Son fantásticas!! No veas lo que se me ha abierto el apetito después de verlas :D
ResponderEliminarBesos.
Gracias Silvia. Mil gracias por dejar tu comentario, desde aqui decirte que eres mi idola. Me encanta tu blog.
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